Cuando Sustituir tu Chaleco Compensador
Un BCD cómodo y bien ajustado nos puede dar años de servicio confiable. ¿Unas pocas marcas de desgaste o un cierre roto o dos señalan el fin de su utilidad? ¿Un BCD tiene fecha de vencimiento?
Confiamos en nuestro BCD para garantizar que tengamos una inmersión cómoda y segura; una falla en el BCD podría tener consecuencias muy graves cuando la mayoría de nosotros necesitamos controlar nuestra flotabilidad, por lo que necesitamos monitorear la condición del BCD así como su edad. En general, podríamos proporcionar una inspección rápida de nuestro BCD antes y quizás después del uso, pero rara vez consideramos que se les haga un servicio.
Use su buen juicio y el de su técnico de servicio cuando decida si desea reemplazar su BCD o su computadora de buceo.
Antes de usar su BCD, especialmente cuando lo use por primera vez en muchos meses, inspeccione la condición de la manguera del inflador, verifique que los materiales no se degraden, infle completamente e inspeccione las costuras en busca de fugas y válvulas de descarga para ver si funcionan. raspaduras o desgarros. El inflador y las válvulas de descarga deben ser revisados periódicamente, especialmente a medida que el BCD envejece. Las inspecciones anuales son un buen estándar de práctica, especialmente para BCDs en uso por cinco años o más.
Si bien los BCD no tienen una vida útil explícita, es importante monitorear su condición de manera cuidadosa y regular. Si la manguera está en buenas condiciones sin signos de rotura, no hay fugas, el control de la flotabilidad es bueno y usted da servicio al inflador y a las válvulas de descarga anualmente después de los primeros cinco años de uso, entonces aún debe tener un BCD confiable. Un buen técnico de servicio le avisará de cualquier fragilidad de las piezas de plástico, grietas en las mangueras o desgaste excesivo. Esté atento a las fugas y grietas, especialmente si su BCD tiene más de 10 años. Si la moda o la función no le piden que retire su antiguo BCD, solo asegúrese de estar alerta ante cualquier señal de advertencia de que su funcionalidad, y por lo tanto su seguridad, pueda verse comprometida.